El turismo comunitario surge como una alternativa económica de las comunidades rurales y campesinas para generar ingresos complementarios a las actividades económicas, defender y revalorizar los recursos culturales y naturales locales.
Existen varias asociaciones que tienen como objetivo conectar las microempresas indígenas a los mercados mundiales. Es el caso de APEC Women Leaders Network quien invitó a China Taipei a unirse a Vietnam, el Perú y Chile, en un proyecto piloto para ayudar a las mujeres, las más afectadas por los temporales, a construir microempresas y abrirse a los mercados globales.
Conocida como la Red de Comercio de la Microempresa de la Mujer, el proyecto APEC enseñó estas mujeres cómo hacer coincidir sus productos a un mercado extranjero y prepararlos para la exportación, además ayudó a coordinar, facilitar y educar a las mujeres productoras en China Taipei. El piloto permitió un mayor número de mujeres para ganarse la vida y cuidar a sus familias en casa. Las oportunidades de empleo han aumentado a medida que las marcas ganan publicidad y el espíritu del proyecto sea difundido.
A nivel mundial, dirigidas por mujeres, las microempresas en las comunidades remotas y rurales luchan por ampliar sus mercados más allá de sus aldeas porque carecen de vínculos con los distribuidores internacionales. Asimismo, no están al tanto de nuevas oportunidades comerciales y la falta de comprensión de la necesidad de controlar la calidad del producto. Esto les impide tomar ventaja de una mayor apertura comercial, y aumentar así los ingresos.
El proyecto APEC ha trabajado con empresas de la Mujer Mapuche y la Asociación Artesanal Artesanía en Chile, el QillaMaqi en el Perú , y el Centro para el Desarrollo de Mujeres de Vietnam .
Además de aislamiento geográfico y la falta de acceso a la financiación, muchas microempresas ofrecen los mismos productos, lo que hace difícil de vender a nivel nacional, por eso es importante la apertura a mercados extranjeros. Por otro lado, es una buena manera de intercambiar cultura y preservar las costumbres de la comunidad, y por otro lado genera oportunidades de desarrollo para la familia y el pueblo.
Si bien existe la posibilidad de que estas mujeres para posicionar sus productos en nuevos mercados, sin embargo, es necesario un apoyo continuo para ayudar en la transición de las empresas locales a los exportadores de puesta en marcha.
El desarrollo del turismo rural comunitario ha tenido un gran impulso en Latinoamérica, debido a la conformación étnica y cultural de los pueblos. En la Argentina se ha identificado el gran potencial turístico que presentan las culturas de pueblos originarios y campesinos, en combinación con el marco natural donde se ubican estas comunidades. Esta propuesta turística vivencial, sumada a la vocación de servicio de sus habitantes, se combinan para brinda una experiencia turística única.
Fuente: APEC