Las reservas y compras a través de sitios web son cada vez más frecuentes y la industria de viajes en línea se va incrementando. Un estudio realizado por Google ha demostrado que nuestras interacciones con estos agentes de viajes y otros negocios pueden ser más complejos de lo previsto inicialmente, ya que tratamos con ellos a través de múltiples plataformas y canales con diferentes propósitos. Todo se reduce a la diferencia entre asistencia a las interacciones y la última interacción.
Es fácil centrarse en ese punto final de la llamada, el formulario de reserva de la web de la empresa cuando las transacciones se llevan a cabo, pero hay muchos otros factores que ayudan a los negocios a atraer a estos clientes y, esencialmente, comienzan el viaje de los clientes, tales como canales sociales de comunicación y herramientas de marketing como correos electrónicos. Estas interacciones iniciales de asistencia destacan ofertas y razones para comprar y son tan importantes para el viaje en general. Los datos de este estudio muestran que es aún más importante para las empresas de turismo apreciar este camino más ancho y la diferenciación entre los canales, porque el viaje de los clientes en la industria del turismo es más largo en promedio.
Otra característica interesante del estudio de Google es que los datos sobre las diferencias nacionales en los hábitos de consumo: el e-mail marketing es un gran éxito para conseguir alcanzar muchos clientes, especialmente en Brasil, donde es un canal de conciencia fuerte; los japoneses parecen tener ningún interés en absoluto y otros países responden bien a otros factores, como por ejemplo los británicos responden bien a los anuncios en línea.
Hay mucho para considerar en turismo, que es visto como un producto de alta participación, y esto significa que las personas se toman su tiempo y necesitan las notificaciones por correo electrónico y otras herramientas para guiarlos suavemente hacia esta última interacción. Entender estos datos provistos por Google y el uso de las interacciones para su favor, podría ayudar a las empresas turísticas a administrar mejor este “viaje” en el futuro.
Fuente: Tourism Review