Los turistas cuando se encuentran de visita deben actuar acorde a la cultura del lugar y las normas preestablecidas por respeto a la comunidad local. Suele ocurrir por ejemplo ante la visita a una mesquita se solicita que las mujeres se cubran la cabeza con un velo o cuando los turistas se encuentran visitando ruinas se prohibe treparlas. Los modales de los turistas son importantísimos para mantener una buena convivencia entre el turismo y la comunidad local.
Hace poco China anunció que impulsará una ley con el fin de «enseñar modales» a sus turistas, se contemplarán sanciones para los viajeros que no respeten las costumbres y tradiciones locales. Esta medida se suma a un programa televisivo en el que se pone de manifiesto la falta de modales de los ciudadanos chinos cuando hacen turismo.
Los turistas chinos poseen mala reputación, son numerosos los casos que en sus viajes al extranjero han protagonizado sonados episodios por su mal comportamiento.
El caso más reciente ocurrió en mayo, cuando un joven chino de 14 años pintó en una de las paredes del templo de Luxor (Egipto), una de las reliquias culturales más admiradas del país. El joven escribió «Din Jinhao estuvo aquí» en una escultura de piedra, un suceso por el que sus padres tuvieron que pedir disculpas y que generó fuertes protestas a través de las redes sociales.
Ante este tipo de actos, el gobierno chino redacta una serie de recomendaciones sobre «turismo civilizado» que advierten de multas ante este tipo de acciones e incluyen una guía que se entregará en el momento de contratación de los viajes.
Fuente: Europapress